El Balón Blanco y Negro
El octavo campeonato
El equipo de León ganó su octava corona y entró a los líderes en conquistas.
El León fue el equipo que durante todo el torneo jugó mejor al futbol, la cancha respeta al que sabe jugar, fue líder y ahora es el campeón. Respetó su juego de siempre tocar el balón, supo atacar y defender cuando fue necesario, todo en conjunto para que ganaran utileros, masajistas, nutrióloga, psicóloga, doctor, auxiliares, preparador físico y director técnico, además, su presidente, que supo escoger a un gran entrenador como Ignacio Ambriz para ser campeón.
León vs Pumas
Al empezar el partido, León se fue encima y los presionó desde la salida, no le dio oportunidad de salir a Pumas más que con pelotazos y brincando líneas, de ahí se derivó el gol de Gigliotti, que corrió haciendo una diagonal detrás de los centrales y el que lo marcaba no lo siguió, él recibió un gran pase de Navarro en el hueco entre central y lateral, y con una buena recepción orientada hizo un disparo con la pierna derecha al segundo poste y Talavera recibió un trallazo que le dobló la mano y cayó el primer gol.
Pumas al recibir el gol reaccionó y entonces el partido se volvió muy disputado en mitad de cancha, pero los Universitarios no tuvieron muchas oportunidades y en una desafortunada jugada, en la cual chocan con las cabezas Mosquera y Vázquez que, para mí, fue una muy buena decisión de los doctores de Pumas no dejarlo jugar más, porque fue un duro golpe en la cabeza y cuando cayó ni las manos metió, claro que esto perjudicó a Pumas, pero la salud de una persona es lo más importante.
Vinieron los cambios, pero el que más acertó fue Ambriz al meter a Yairo Moreno que con un gran pase del “Chapito” Montes le dio la oportunidad de irse sobre la portería y hacer un quiebre al defensa de los Pumas y anotó con mucha tranquilidad.
Pumas fue un gran adversario, fue el segundo lugar de la liga en la tabla general y mantuvo su espíritu de combate, pero perdió contra un gran rival: León.
Todos los jugadores de León merecen un reconocimiento por el trabajo, pero un jugador que ha sido un gran ejemplo de pundonor, de vergüenza deportiva y un corazón de león es Ignacio González, decían en otros equipos donde estuvo que era un tronco y que no pasaba nada con él, que equivocados estaban con este muchacho que llegó a León en la segunda división y junto con el “Chapito” ascendieron al equipo ganando el campeonato, después ganan un bicampeonato de primera división con Gustavo Matosas y ahora, después de una lesión que casi lo retira del futbol, la expulsión de un compañero le dio la oportunidad de estar en el equipo titular en la gran final, salvó a León de un gol en contra con una barrida magistral y jugó bien. El corazón de león gana otro campeonato, es el talismán del equipo. Gracias, Nacho, por enseñar a los jóvenes que nunca hay que darse por vencido, eres un gran ejemplo de disciplina, tenacidad y buena persona. Hasta luego, Nacho, ejemplo de jugador, la gratitud es la memoria del corazón.
Hasta pronto.
