

Gran final de la Copa Libertadores 2019
La magia del futbol se hizo presente en Lima. En una tarde en la cual parecía definida la final de la Copa Libertadores, Gabigol apareció con un doblete en los últimos 5 minutos de juego para así robarle a River Plate el bicampeonato continental y darle a Flamengo su segunda Libertadores en la historia.
A pesar de que los brasileños salieron con intensidad al terreno de juego, los millonarios les bajaron el ritmo de un golpe cuando al minuto 13 Nacho Fernández, tras un pase de Enzo Pérez, tiro una diagonal retrasada en la cual dos defensores cariocas dudaron, dejando solo a Borré que de primera intención definió con un tiro raso inatajable para el arquero Diego Alves.
Con el marcador a favor, los argentinos se hicieron dueños totales de la primera mitad, en la cual los jugadores de Flamengo no realizaron ni un solo tiro a gol. A través de Palacios y De la Cruz, River tuvo la oportunidad de aumentar el marcador y ponerles hielo a las acciones. Pero el futbol es de goles, no de merecimientos.
El complemento fue diferente, los dirigidos por Jorge Jesús adelantaron líneas y generaron acciones de gol, aunque en el último tercio de campo les faltaba claridad. Después de un exigente partido, el cansancio apareció en el cuadro de River Plate, situación que aprovecharon los de Flamengo.
Al minuto 88, en una jugada obra de Bruno Henrique en la cual jalo la marca de 4 defensores y tiro un pase filtrado a De Arrascaeta, quien como pudo cruzó el balón, apareció la figura de Gabriel Barbosa para hacer la anotación que le devolvía el alma a todos los aficionados del ‘más querido de Brasil’.
El golpe anímico fue duro para los millonarios y las desconcentraciones no se hicieron esperar. Corría el minuto 91 cuando en un balón dividido la mala marca de Javier Pinola puso a Gabigol de frente al arco de Armani, que nada pudo hacer ante el zurdazo que significó el 2-1 definitivo que le dio el título de la Copa Libertadores al Flamengo de Brasil.
A pesar de su doblete, Gabigol se fue expulsado al minuto 95 junto a Exequiel Palacios tras un conato de bronca entre ambos.
Y así fue como el Flamengo logró una de las más grandes hazañas en la historia de la Libertadores. 38 años después, Río de Janeiro vuelve a tener un campeón de América. Ambos equipos dieron un partido espectacular, con giros inesperados y un final emocionante.
Ahora, Flamengo ira a enfrentar el mundial de clubes de la FIFA, en donde deberá volver a mostrar de que está hecho.